Ajustar un protector bucal a tu mandíbula correctamente es esencial para garantizar su eficacia y comodidad. Aquí tienes los pasos para ajustar un protector bucal a tus dientes:
Materiales necesarios:
- Agua caliente (para ablandar el protector bucal)
- Un recipiente con agua fría (para enfriar el protector bucal)
- Protector bucal
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Hervir el agua:
- Llena un recipiente con agua y caliéntala hasta que esté casi hirviendo.
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Sumerge el protector bucal:
- Sumerge el protector bucal en 200ml de agua caliente durante unos 30-40 segundos. Esto lo ablandará lo suficiente para que puedas moldearlo.
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Enfría el protector bucal:
- Saca el protector bucal del agua caliente y sumérgelo de inmediato en el agua fría durante 45 segundos. Esto endurecerá el material lo suficiente como para que puedas manipularlo sin quemarte.
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Moldea el protector bucal:
- Saca el protector bucal del agua fría y colócalo en tu boca. Alinea el protector bucal de manera que cubra tus dientes superiores y presiónalo contra tus dientes con los dedos y la lengua.
- Muerde con fuerza el protector bucal y usa tus dedos para presionar contra tus dientes para asegurarte de que se adapte bien.
- Asegúrate de que esté bien ajustado a tus dientes y que sea cómodo.
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Ajustes finales:
- Si sientes algún punto de presión incómodo o áreas que necesitan ser moldeadas nuevamente, puedes repetir los pasos 2 a 4.
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Cuidado y mantenimiento:
- Después de cada uso, enjuaga el protector bucal con agua tibia y sécalo antes de guardarlo en su estuche o en un lugar limpio.